Entramos en la RN-103 entre
chubasco y chubasco: Alba, Sara, Zeta, Jon, Aitor, Iñaki y David.
Descendemos a la zona profunda, a contimuar con la exploración de la G- del Tenedor, descubierta la semana pasada, tras realizar una escalada y descender a los pocos metros un pozo.
Mientras un equipo comienza la
topografía, otro avanza a dejar equipado para el equipo de topgrafia un
resalte muy resbaladizo y después comenzar una escalada para intentar
subir al nivel superior que se adivina.
Tras realizar la escalada de 17 m
ponemos pie en galeria, el aire también circula en altura. Tiene buena
pinta. El equipo de topografía llega a la base de la escalada y se le
infoma que lo mejor es continuar la topo por abajo hasta la zona del
resalte y después no continuar por lo húmedo y barroso (traen buzos más
impermeables para esa zona), que lo más interesante es luego subir a
topografiar la que parece una continuación fósil interesante y que vamos
a revisar.
Dejamos equipada la escalada como
pozo y avanzamos en la galería alta unos 100 m hasta alcanzar una gran
chimenea que corta la galería. También se ve un pozo que sondeamos en
unos 15 a 20 m y enfrente continúa la galeria que traemos (hay que
hacer una travesia de unos 10 m para alcanzarla). Optamos por descender
el pozo y cuando llegamos a la base, nos alcanza el equipo de topo. Al
fondo del pozo se desciende otro resalte y nos para un pozo regado y
sondeado en unos 25 m.
El equipo desciende detrás llevando la topografía hasta el último punto posible. Sumamos lo topografiado hoy y nos da 350 m.
Se nos ha hecho tarde y además no tenemos más cuerda, y nos quedan apenas 3 anclajes por lo que decidimos comenzar el ascenso.
Esta nueva zona parece que nos va a
llevar mucho trabajo porque se ve alguna posible nueva galeria, pero
para avanzar em cualquier sentido (menos el P-25 a descender) necesita
de travesía y/o escalada. La zona también exige mucho material pues todo
el nido de material que teníamos está ya instalado. Lo mejor es que hay
corriente de aire y nuevas posibilidades. Estamos moviendonos a la cota
de – 300 m.p. y el fondo de la sima de Cárcabas no anda lejos, por lo
que con nucho trabajo y un poco de suerte quizá podríamos conectar,
aunque por el momento solo es una esperanza.
Ascendemos contentos y estamos
todos en superficie a las dos y media de la madrugada, todavía nos queda
un buen rato para llegar a la merecida cama.
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